martes, 1 de mayo de 2012

poema en la nave


Domingo. El padecimiento más común de los 7 me visita en mi nada. Podría recomendarte que vuelvas a casa. Es que la magia está sino en reaparecer el objeto.

Podría soltar el nudo, y el navío lleno de cabras se perdiera en el agua donde, te aseguro,  dejaría de escucharlas. Al menos hasta su exterminino.

De todas maneras, hoy no es buen momento para empezar.
Vivir solo cuesta vida y morir no cuesta nada.





PD: Solo para ver al perro 






Ingrid Grunge.